¿Es la cocaína una de las drogas más adictivas que existen?

¿Cuáles son las drogas más adictivas? ¿Es la cocaína la que tiene los peores efectos? En este artículo resolvemos a tus dudas.

Recuerda la importancia de acudir a un centro de adicciones en Barcelona si sufres una dependencia, esto puede salvarte la vida y evitar sufrir más consecuencias irreversibles derivadas del consumo de drogas.

 

¿Es la cocaína una de las drogas más adictivas?

En primer lugar, hay que aclarar que es difícil determinar si hay drogas más adictivas o menos, ya que todas las drogas lo son. 

La adicción a la droga no solo depende del tipo de droga, sino de otros aspectos que influyen en la persona que consume.

La rapidez con la que una persona puede adquirir un hábito de dependencia varía mucho en función de cada persona, depende de:

• aspectos biológicos
• aspectos sociales
• aspectos familiares

No obstante, sin duda, la cocaína forma parte del grupo de drogas más adictivas. Se estima que 2 de cada 10 personas que la prueban generarán dependencia hacia ella.

Ésta se manifiesta como una ausencia total de control en el consumo, es decir, que cuando la persona comienza la ingesta de esta sustancia no puede parar o limitarla. Todo ello explica por qué es difícil desengancharse de la coca.

La cocaína misma no precisa necesariamente de un consumo diario para volver al consumidor dependiente de ella.

En ocasiones, incluso, puede darse el caso de un paciente que tenga una grave dependencia pero que no consuma cocaína en semanas. Eso dificulta que el paciente reconozca el hecho de sufrir una dependencia de esta sustancia, lo que suele derivar en un autoengaño prolongado.

Pero, ¿por qué es la cocaína una de las drogas más adictivas? La cocaína, al ser consumida, se adhiere a la proteína transportadora de dopamina en el cerebro, impidiendo así la eliminación de este neurotransmisor. Esto da lugar a una acumulación de dopamina que provoca los efectos placenteros y eufóricos del inicio.

Esto hace que, a medida que se consume, el sistema de recompensa cerebral se acabe atrofiando y se deteriore el funcionamiento de la dopamina y otros neurotransmisores.

El consumidor querrá y necesitará consumir entonces una y otra vez para conseguir los mismos efectos o, simplemente, para estar bien.

 

 

¿Cuáles son las drogas más adictivas?

El tipo de droga tiene también relevancia, dando lugar así a algunas drogas más adictivas que otras:

• El alcohol puede ser consumido e incluso abusar de su consumo en muchas ocasiones sin que llegue nunca a originarse una dependencia. Es una droga que muchas personas consumen a menudo sin desarrollar nunca una adicción, aunque no está exenta de peligros ya que, las personas que desarrollan alcoholismo, sufren graves consecuencias derivadas de este.

 

• Por otro lado, en el caso de la heroína (una de las tres primeras drogas más adictivas sin duda), pasar de un consumo esporádico a la adicción es un proceso mucho más rápido sencillo y habitual.

 

• La cocaína, como hemos mencionado anteriormente, impide que las neuronas desactiven la señal de dopamina, originando un aumento de esta sustancia en el cerebro hasta tres veces por encima de las cantidades consideradas normales. Por ello, está entre las drogas más adictivas.

 

• La nicotina, presente en el tabaco, es considerada la tercera droga más adictiva del mundo, solo superada por la heroína y la cocaína. Se considera que eleva la dopamina entre el 25% y 40% en los consumidores.

 

• Sustancias como las alucinógenas, que dan lugar a dependencia de manera más lenta que, por ejemplo, otras consideradas más adictivas, como la cocaína. Sin embargo, causan más daños cerebrales, como ictus, o psicológicos, como psicosis.

 

Consumir para ‘paliar’ los efectos del consumo

El consumo de cocaína provoca cuadros psicóticos paranoides, que pueden dar lugar a :

• agresividad
• síndrome de abstinencia
• cuadros de ansiedad
• depresión
• tentativas de suicidio

En cuantos a sus repercusiones físicas, daña los pulmones y el corazón, incrementando el riesgo de sufrir coágulos de sangre en el sistema circulatorio e infarto de miocardio. Es causante, además, de ictus cerebrales. Los efectos de la coca en el tabique nasal pueden ser irreparables y se asocian con numerosas dolencias.

Cuando se ingiere por la boca, puede provocar daños en el estómago y en el tejido de los intestinos.

Los consumos a largo plazo pueden verse acompañados de:

•  dificultad para conciliar el sueño
• sensación de inquietud constante
• pérdida de apetito
• situaciones de malnutrición y a sensibles pérdidas de peso.

La aparición de todos estos efectos, junto con una mayor sensibilización a las convulsiones, la ansiedad, y otros efectos tóxicos llevan a muchos consumidores a volver a consumir esta droga.

El hecho de que la cocaína forme parte del grupo de drogas más adictivas hace que, cuando ésta es consumida cada vez más a menudo para lograr el mismo placer que se producía con el consumo inicial, aparezca una espiral de aumento de la ingesta que termina por ser muy perjudicial para la salud.

 

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Aunque existan drogas más adictivas, todas las drogas lo son y, si se consumen, se corre un alto riesgo de desarrollar una dependencia.

La adicción no es un vicio pasajero, es una enfermedad grave y compleja que necesita tratamiento.

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Además, al ser un tratamiento ambulatorio, el paciente podrá realizarlo sin necesidad de ingreso y con total comodidad y privacidad, compaginándolo con sus rutinas habituales.

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