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Pesadillas por dejar de fumar porros: ¿por qué ocurren?

Al dejar el cannabis por un tiempo, o intentar hacerlo de forma definitiva, muchos consumidores reportan tener pesadillas por dejar de fumar porros. Esto sucede por una razón y no es permanente, sin embargo, puede llegar a ser desagradable y llevar a la persona adicta a preguntarse “¿cómo dejar los porros sin tener pesadillas?”.

 

¿Qué es el cannabis?

La marihuana, o cannabis, es una droga psicotrópica, un conjunto de flores y hojas extraídos de la planta “Cannabis Sativa”.

Esta droga es un fuerte depresor del sistema nervioso y está formada a su vez por cientos de sustancias químicas, entre ellas, 113 cannabinoides.

Los cannabinoides más conocidos son el CBD y el famoso THC, siendo este último el responsable del “colocón”, de que sea una droga altamente adictiva, de la mayoría de sus efectos secundarios y de que esta sustancia sea ilegal.

 

¿Qué es el famoso THC y cómo actúa en el cerebro?

El THC es el cannabinoide más presente en la marihuana y el principal compuesto psicoactivo de esta, esto quiere decir, que es el que afecta a la percepción del cerebro, los pensamientos, el estado de ánimo etc.

El cannabis puede consumirse de diversas formas, pero la más común y popular es a través de los porros, es decir, en cigarrillos liados de marihuana.

Cuando el humo llega a los pulmones, el THC pasa rápidamente al torrente sanguíneo y de ahí al cerebro, en cuestión de minutos se sentirán los efectos, algunos de ellos en ocasiones no deseados, peligroso y desagradables.

Pese a que el consumo de cannabis se ha normalizado excesivamente en estos últimos años y sean millones las personas que fuman porros en todo el mundo, también se está aumentando la conciencia acerca de sus efectos nocivos y son cada vez más los que buscan dejar los porros y superar la adicción.

Sin embargo, esto no es una tarea fácil en la mayoría de los casos. El camino hacia la abstemia es arduo y escabroso, el síndrome de abstinencia inicial es complicado y los efectos iniciales que tiene el abandono de la sustancia son muy incómodos, como las pesadillas por dejar de fumar porros.

Pesadillas por dejar de fumar porros: ¿cómo afecta el cannabis al sueño?

El sueño del ser humano consta de cinco fases:

  1. Adormecimiento
  2. Sueño ligero
  3. Transición a sueño profundo
  4. Sueño profunco o sueño Delta
  5. Fase REM (movimiento ocular rápido)

La última de estas fases, la fase REM, es en la que se producen los sueños. El problema de consumir cannabis es que, pese a que pueda parecer inicialmente que ayuda a conciliar el sueño y que favorece el descanso, la realidad es que impide que entremos en fase REM.

Esto se debe, de nuevo, al THC. Es el THC el que bloquea la entrada en el sueño REM e impide que el descanso sea de calidad. Por ello, las personas que aseguran tener sueños muy vívidos o pesadillas por dejar de fumar porros, están en lo cierto y tiene una explicación: el efecto rebote.

 

Pesadillas por dejar de fumar porros: ¿por qué ocurren?

Los sueños vívidos o pesadillas por dejar de fumar porros se deben a que, tras abandonar el consumo de estos, se genera un efecto rebote como respuesta al largo periodo de tiempo que ha estado nuestro cuerpo y nuestro cerebro sin entrar en fase REM.

Muchas personas aseguran tener pesadillas por dejar de fumar porros hacia el final de la noche o justo al entrar la mañana, esto tiene una explicación.

Como ya hemos visto anteriormente, la fase REM es la última de las fases del sueño, cuando se abandona el consumo de marihuana, el THC aún sigue en el cuerpo, ya que se almacena en los tejidos adiposos y tarda en eliminarse. Por ello, es posible que este THC aún bloquee parte de la fase REM durante la noche, y finalmente consiga entrar en ella hacia el final.

Las pesadillas por dejar de fumar porros, de nuevo, se deben a que el cerebro, el organismo y el sueño aún se están regulando y necesitan un periodo de adaptación para volver a la normalidad.

Las pesadillas por dejar de fumar porros en ningún caso son algo definitivo, remitirán al cabo del tiempo mientras se mantenga la abstemia.

 

Pesadillas por dejar de fumar porros: no son las únicas consecuencias de la marihuana

Las pesadillas por dejar de fumar porros no son en absoluto las únicas, ni las peores consecuencias del cannabis.

La mayoría de los consumidores desconocen los graves efectos secundarios que provoca el consumo de porros a largo plazo, no solo psicológicos, sino también físicos y fisiológicos. Consumir marihuana de forma constante y/o abusiva a lo largo del tiempo puede repercutir directamente en tu salud, estilo de vida y hasta en las relaciones personales.

Estas son solo algunas de las consecuencias del consumo de marihuana aparte de las pesadillas por dejar de fumar porros:

  • Ansiedad
  • Depresión
  • Ataques de pánico
  • Agresividad
  • Psicosis o esquizofrenia
  • Cambios drásticos de humor
  • Problemas cardiovasculares (arritmias, taquicardias, infartos)
  • Problemas respiratorios (bronquitis, cáncer de pulmón)
  • Problemas gastrointestinales
  • Fallos y pérdidas de memoria
  • Apatía y falta de interés
  • Dificultad para el aprendizaje
  • Fracaso escolar y laboral

Las pesadillas por dejar de fumar porros son solo una consecuencia desagradable al comienzo de la abstemia, pero que merece la pena aguantar durante ese periodo de tiempo y mantener la abstinencia definitivamente, de lo contrario las pesadillas son de lo menos grave que puede suceder.

 

Tratamientos para la adicción a los porros

Las pesadillas por dejar de fumar porros son parte del camino hacia la abstinencia. Este camino es complicado, arduo, desagradable y, en ocasiones, hasta insoportable. Muchas personas sufren diversas recaídas antes de abandonar definitivamente la adicción a los porros, y otros no lo logran jamás.

Una vez desarrollada la adicción, dejar el cannabis no es nada fácil, por ello es importante buscar ayuda profesional y dar con el tratamiento adecuado.

No existe de momento un medicamento determinado para curar la adicción a los porros, sin embargo, sí hay otros tratamientos con una alta eficacia que consiguen reducir el “mono” y así, poco a poco, dejar de consumir y superar la adicción. Estos tratamientos son: psicoterapia y Estimulación Magnética Transcraneal.

 

Estimulación Magnética Transcraneal (EMTr)

La Estimulación Magnética Transcraneal es la más innovadora y revolucionaria técnica desarrollada para el tratamiento de las adicciones, entre ellas, la adicción a los porros.

Es ahora mismo el único tratamiento existente que logra reducir a los pocos días el mono y las ganas de consumir. ¿Y cómo lo consigue? Trabajando y actuando directamente sobre la raíz del problema: la parte neurológica.

La EMTr funciona a partir de la aplicación de ligeros estímulos electromagnéticos sobre la cabeza del paciente que, de forma indolora e imperceptible, alcanzan el cerebro y estimulan las áreas neuronales que han quedado dañadas por la droga.

Además, estos estímulos logran corregir el funcionamiento y la disposición de neurotransmisores como la dopamina, neurotransmisor protagonista en el sistema de recompensa cerebral y, por tanto, imprescindible para la recuperación.

La EMTr es un tratamiento que se lleva usando más de 20 años y ya está aprobado por la Unión Europea como tratamiento para las adicciones, ya que cuenta con una altísima tasa de éxito y una enorme efectividad.

La Estimulación Magnética Transcraneal es segura y no tiene efectos secundarios, a diferencia de la medicación.

También es un tratamiento cómodo y que se adapta a el tiempo y la vida del cada paciente, ya que es completamente ambulatorio, por tanto no será necesario el ingreso hospitalario ni en un centro de desintoxicación.

En Newline somos el primer centro especializado en España en el uso de la técnica EMTr.

Llevamos años volcándonos en la salud de nuestros pacientes como única prioridad, tratando casos cada día de personas que sufren adicciones y que han intentado en muchas ocasiones superarlas sin éxito.

Tras varios intentos fallidos con otros tratamientos y diversas recaídas, llegan a Newline con poca esperanza y buscando quemar su “último cartucho”. Tras pocas sesiones con EMTr, estos pacientes se sorprenden al ver sus ganas de consumir drásticamente reducidas. Hemos tratado casos así con éxito en más de 200 ocasiones y nuestro objetivo es continuar haciéndolo lo mejor posible.

 

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